![]() |
Jesus es el Señor |
LOS AFANES DE ESTE SIGLO
La Biblia, nos advierte sobre el peligro de dejarse llevar por los afanes de este siglo, miren los siguientes versículos:
(Luc 8:14) Y la que cayó entre espinos; éstos son los que oyen; mas yéndose, son ahogados de los afanes y las riquezas y los placeres de esta vida, y no llevan fruto.
Este mismo versículo en la RV1865
(Luc 8:14) Y lo que cayó en espinas, estos son los que oyeron; mas idos son ahogados de los cuidados, y de las riquezas, y de los pasatiempos de la vida, y no llevan fruto.
Mar 4:19 pero los afanes de este mundo, y el engaño de las riquezas, y las codicias de otras cosas, entran y ahogan la palabra, y se hace infructuosa.
Luc 21:34 Y mirad por vosotros, que vuestros corazones no sean cargados de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día.
El diccionario DRAE dice:
afán
(Quizá de afanar).
1. m. Trabajo excesivo, solícito y congojoso.
2. m. Trabajo corporal, como el de los jornaleros.
3. m. Fatiga, penalidad, apuro.
4. m. Solicitud, empeño, pretensión, deseo, anhelo vehemente.
5. m. Prisa, diligencia, premura.
Ya sea por inseguridad debido al temor de que comere o que vestire, o por deseos de riquezas la biblia nos advierte sobre el peligro de los afanes de esta vida.
Nosotros como cristianos debemos confiar plenamente en el Señor, porque el prometió suplir todas nuestras necesidades.
Flp 4:19 Mi Dios, pues, suplirá todo lo que os falte, conforme a sus riquezas en gloria en Cristo Jesús.
El SEÑOR nos enseña con la siguiente parabola:
Luc 12:16 Y les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho;
Luc 12:17 y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde almacenar mis frutos?
Luc 12:18 Y dijo: Esto haré; derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí almacenaré todos mis frutos y mis bienes;
Luc 12:19 y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes almacenados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate.
Luc 12:20 Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?
Luc 12:21 Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios.
Luc 12:22 Y dijo a sus discípulos: Por tanto os digo: No os preocupéis por vuestra vida, qué comeréis; ni por el cuerpo, qué vestiréis.
Luc 12:23 La vida más es que la comida, y el cuerpo que el vestido.
Luc 12:24 Considerad los cuervos, que no siembran, ni siegan; que no tienen almacén, ni granero; y Dios los alimenta. ¿Cuánto más sois vosotros de más estima que las aves?
Luc 12:25 ¿Y quién de vosotros podrá con afanarse añadir a su estatura un codo?
Luc 12:26 Pues si no podéis ni aun lo que es menos, ¿por qué os afanáis por lo demás?
Luc 12:27 Considerad los lirios, cómo crecen; no labran, ni hilan; y os digo, que Salomón, con toda su gloria, no se vistió como uno de ellos.
Luc 12:28 Y si así viste Dios a la hierba, que hoy está en el campo, y mañana es echada en el horno; ¿cuánto más a vosotros, hombres de poca fe?
Luc 12:29 Vosotros, pues, no os preocupéis qué habéis de comer, o qué habéis de beber; ni estéis ansiosos.
Luc 12:30 Porque todas estas cosas buscan las gentes del mundo; pero vuestro Padre sabe que tenéis necesidad de estas cosas.
Luc 12:31 Mas buscad primeramente el reino de Dios, y todas estas cosas os serán añadidas.
Luc 12:32 No temáis, manada pequeña; porque a vuestro Padre le ha placido daros el reino.
Luc 12:33 Vended lo que poseéis, y dad limosna; haceos bolsas que no se envejezcan, tesoro en el cielo que no se agote; donde ladrón no llega, ni polilla corrompe.
Luc 12:34 Porque donde está vuestro tesoro, allí también estará vuestro corazón.
Luc 12:35 Estén ceñidos vuestros lomos, y vuestras lámparas encendidas;
Luc 12:36 y vosotros, como hombres que esperan cuando su señor ha de volver de las bodas; para que cuando viniere, y tocare, luego le abran.
Luc 12:37 Bienaventurados aquellos siervos a los cuales cuando el señor venga, halle velando; de cierto os digo, que se ceñirá, y hará que se sienten a la mesa, y vendrá y les servirá.
Luc 12:38 Y si viniere a la segunda vigilia, o aunque viniere a la tercera vigilia, y los hallare así, bienaventurados son aquellos siervos.
Luc 12:39 Pero esto sabed, que si supiese el padre de familia a qué hora había de venir el ladrón, velaría ciertamente, y no dejaría minar su casa.
Luc 12:40 Vosotros, pues, también, estad apercibidos; porque a la hora que no penséis, el Hijo del Hombre vendrá.
Amigo el Señor viene.
MARANATA
No hay comentarios:
Publicar un comentario